Utilizando pinturas especiales, puedes pintar cuadros con las manos y los dedos, en vez de emplear un pincel
Preparación
Los colores para pintar con los dedos se venden en tiendas de material artístico, papelerías y grandes almacenes. También puedes hacer tu propia pintura mezclando almidón y colores de gouache. Pide a tu mamá que hierva un poco de almidón de planchar. Déjalo enfriar. Repártelo entre varios recipientes y mezcla un poco de pintura de gouache con el almidón, un color distinto en cada recipiente.
Pintar con los dedos es divertido, pero también es sucio. Por lo tanto, antes de empezar a pintar, ponte una bata o un delantal y cubre con papeles de periódico la mesa o el suelo en que vas a estar trabajando.
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Realización
El papel más apropiado para este tipo de pintura es el brillante. Humedécelo en un recipiente con agua, o debajo del grifo. Extiende el papel, para que quede bien liso, encima de los periódicos. Si se seca demasiado antes de que acabes de pintar, échale un poco más de agua.
Toma un poco de pintura y ponía sobre el papel.
Utiliza principalmente los cinco dedos, pero también el dorso de la mano y el brazo para las pinceladas amplias. Emplea las puntas de los dedos y las uñas para los pequeños detalles.
Cuando hayas terminado el cuadro, déjalo secar. Pídele a mamá que te ayude a alisarlo con una plancha caliente, para eliminar cualquier arruga en el papel. Los papeles pintados así son muy adecuados para envolver regalos.
También se puede pintar con los dedos sobre plástico o cristal, pero debes proteger la pintura con laca.
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