Si imaginas al cuatro como cuatro puntos, puedes mostrarlo como un cuadrado. Y así es como lo veían los antiguos griegos, como una figura con cuatro lados y cuatro esquinas.
El cuatro es un número par. Puede dividirse en dos partes iguales. Para los antiguos griegos, la justicia era un problema que tenía dos lados iguales. Así pues, usaban el cuatro, con sus dos partes iguales, como el símbolo de la justicia.
Era creencia generalizada en la antigüedad que el mundo tenía forma plana, y se hablaba de las “cuatro esquinas” de la Tierra. Y cuatro es el número de los puntos cardinales: Norte, Sur, Este y Oeste. El color es el verde y pertenece al signo de Cáncer, el Cangrejo.
Para muchos pueblos de la antigüedad, el tres era un número mágico. Correspondía a las tres partes de la vida: comienzo, mitad y final. Correspondía también a los tres “reinos” de la Tierra: animal, vegetal y mineral. Y los magos y las brujas trabajaban generalmente en grupos de tres cuando lanzaban sus conjuros mágicos.
