Mi yo secreto no se puede ver.
Mi yo secreto vive en mi cerebro y mira el mundo a través de mis ojos. Mi yo secreto piensa, y sueña, y hace planes, y me impulsa a trabajar. Esos sueños, y esos planes, y esos pensamientos, son míos solamente.
Cuando yo soy bondadoso, o sensato, o sincero, mi yo secreto se siente feliz. Ser feliz de este modo me ayuda a ser cada día mejor.
Mi yo secreto es verdaderamente yo.