Puertas deslizantes
La puerta de un garaje es tan pesada que no podrías levantarla tú solo. Algo debe ayudarte. A veces hay un muelle en la puerta que te ayuda a levantarla. Unas ruedecitas que se deslizan sobre raíles guían la puerta cuando la abres o la cierras.
Puertas correderas
Hay puertas que se deslizan hacia un lado cuando se abren. Tienen unas ruedas en la parte superior, y a veces en la inferior, que corren por un raíl y te permiten empujar la puerta con facilidad.
Puertas plegables
Hay puertas que se pliegan lateralmente al cerrarlas. Estas puertas suelen ser altas y delgadas. Cuando las empujas, se pliegan como un acordeón y ocupan poco espacio.