Los ganaderos tienen un sistema para reconocer a sus reses: las marcan en la piel con una señal que no se marcha nunca. Estas señales son las marcas de ganadería.
Se calienta un hierro que tenga la forma de la señal y se aplica a la piel de la res. Con el calor se quema el pelo y la parte superficial de la piel, y la señal queda marcada para siempre.
Es frecuente ver una marca de ganadería en los toros de lidia, en los caballos de raza y en las vacas lecheras. V iendo las marcas, los entendidos saben quién es el dueño de la res y cuáles son sus características principales.