El calor y las explosiones del interior de la Tierra mueven las moles y capas de roca del interior de la Tierra.
Las moles de roca y las capas sufren todo tipo de presiones.
Se inclinan, se estiran y se pliegan.
La superficie de la Tierra siempre está cambiando, pero tú no lo notas.
Las montañas crecen muy lentamente. Las montañas que vemos hoy en día empezaron a crecer hace miles de millones de años. Algunas todavía siguen creciendo.
Con el paso de los años, el viento, el agua y los glaciares han dado forma a las montañas.