A veces, la tierra tiembla, se agita, retumba y se agrieta.
Un humo negro sale de un agujero del suelo.
¡BUM!
La tierra explota.
Humo, cenizas y escoria salen del suelo y suben a lo alto.
En las profundidades de la Tierra hace tanto calor que las rocas se funden y se transforman en un espeso barro ardiente.
La roca fundida, llamada lava, sale del cráter y fluye por el suelo.
Después, se enfría y se vuelve dura como la roca.
La lava se va amontonando y endureciendo.
Ha empezado a nacer una montaña: una montaña a la que llamamos volcán.