La primavera es verde y, en silencio, bajo la tierra las semillas crecen.
El verano acompaña al arco iris, y muchas flores se abren juntamente.
El otoño es más gris, y las semillas esperan una mano que las siembre.
Pero el invierno es blanco
(el invierno es la noche de las flores).
Las estrellas de escarcha resplandecen.