Aun suponiendo que llegaras a vivir cien años, no tendrías tiempo de leer todas las palabras que se imprimen en el mundo… en un solo día. Las máquinas de impresión pueden imprimir miles de millones de palabras cada día en los periódicos, revistas y libros. Pero antes de ser impresas, las letras tienen que transformarse en tipos, como los que ahora estás viendo. Poner las letras en tipos es el trabajo que realiza el linotipista. Se sienta delante de la máquina, llamada linotipia, que tiene un gran teclado parecido al de una máquina de escribir. Tiene letras, números y símbolos en cada tecla. Si el linotipista quiere, por ejemplo, componer la palabra «abracadabra», pulsa las teclas que contengan las letras correspondientes. Entonces la palabra «abracadabra» se moldea en metaL «Cuando el metal se endurece, se entinta, se prensa contra el papel y entonces aparece «abracadabra» impreso. La mayoría de empresas que publican libros, revistas y periódicos utilizan la máquina llamada linotipia, que moldea una línea de una vez. En la actualidad, la composición de muchos libros y revistas se hace por el sistema de la fotocomposición. En un teclado parecido al de una linotipia se pulsan las letras del texto que se quiere componer. Cada pulsación hace en una cinta de papel unos agujeritos que son el código de la letra pulsada. Luego, esta cinta se hace pasar por la máquina fotocomponedora que interpreta los códigos perforados e impresiona en una película las fotografías de cada uno de los signos y letras codificados en la cinta perforada. Con este sistema se aumenta la rapidez de la composición y las editoriales pueden hacer más libros en menos tiempo. |
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Teclados para componer libros
