Hace mucho tiempo, cuando la gente empezó a preocuparse por los números, aprendió algo interesante. Al dividir los números en dos partes, ocurrían dos tipos de cosas diferentes. Algunos números se dividían en dos partes iguales, como el cuatro:
Un número que se divida en dos partes iguales se denomina número par.
Pero al dividir otros números en dos partes, las dos partes son desiguales. Por ejemplo, si divides el número tres en dos partes, tendrás un uno y un dos.
El número que se divide en dos partes desiguales se denomina número impar.
Hace unos tres mil años, los chinos llamaban números “femeninos” a todos los números
pares, como el 2, el 4, el 6 y el 8. Y los números impares, como el 1, el 3, el 5, el 7 y el 9, los consideraban “masculinos”.
Los antiguos griegos decían que el 5 representaba el matrimonio, porque era el primer número que se componía de un número “femenino”, el 2, y uno “masculino”, el 3. (Para los griegos, el 1 no era un número, por lo que su primer número impar era el 3.)
Con números pequeños, es fácil decir si son pares o impares. Pero ¿cómo adivinar si un número alto, como el 5.284 o el 121.336, es par o impar? También es muy fácil. Si la última cifra es 0, 2, 4, 6, 8, el número es par; si 1, 3, 5, 7, 9, impar.
