Un rayo de sol calienta el rincón donde dormita el gato y forma una mancha de luz en la que ves una telaraña y las partículas de polvo que flotan en el aire.
Pero un rayo de sol es algo más que todo esto.
Es parte de la luz del sol.
Y la luz del sol tiene muchos colores: rojo, naranja, amarillo, verde, azul, añil y violeta.
Todos estos colores que hay en la luz del sol
se mezclan entre sí
de forma que en un rayo de sol
no se ven los colores sueltos
sino sólo luz.
Luz para ver el gato,
la telaraña, las partículas de polvo
y todo lo que te rodea.